La importancia de la localización de software para la exportación

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Cómo un buen servicio de localización puede ayudar a garantizar el éxito de su software en el mercado externo

 

Cuando se piensa en la exportación de un software, al principio, parece ser una tarea simple: bastaría simplemente con traducir comandos, manuales y términos de programa, ¿verdad? La verdad es que no funciona de esta manera.

 

Como ya explicamos previamente en el texto “La localización de softwares y la industria de la tecnología” del 29 de febrero, el proceso de exportación de software consiste en dos etapas: la internacionalización y la localización. La primera tiene como objetivo dejar el programa “neutralizado”, es decir, que se lo aplique a cualquier mercado al que se destine y con algunas adaptaciones. Además de la internacionalización, es hora de que el software se caracterice y direccione a un público distinto del país de origen, es decir, localizar el software en el mercado.

 

Mucho más complejo que la internacionalización, la localización es un proceso con más etapas, y que exige un número mayor de profesionales de traducción de TI con habilidades específicas. Durante el proceso de localización, un equipo garantizará que el software se direccione en su totalidad a un público objetivo, de acuerdo con sus especificaciones lingüísticas y usos. El direccionamiento se realiza en todos los ámbitos del software: lenguaje, símbolos, paleta de colores, organización, ejecución, funciones y cualquier otro aspecto que necesite adaptación.

 

Todo proceso de direccionamiento, que se lleva a cabo en la localización de software, tiene como objetivo el uso del producto por un público específico. El direccionamiento es apenas uno de los pasos de la localización, ya que, a pesar de que todos los aspectos lingüísticos y visuales estén de acuerdo con los hábitos de los aspectos culturales del público objetivo, no necesariamente significa que será un producto que atienda las demandas y especificaciones necesarias.

 

Los colores son un gran ejemplo de cómo es posible influenciar la manera en que un usuario percibe el software. Aunque algunos colores tienen significados universales, este asume un significado propio/singular en cada región. El color rojo, por ejemplo, además de significar amor también se lo asocia con el luto en Sudáfrica, y con la vida en Japón. Por lo tanto, asumir el uso de un determinado color para indicar un comando, una alerta o una configuración, puede no ser tan obvio a la hora de programar un software.

 

En este caso, todo el trabajo de traducción y tecnología que una localización requiere deberá estar asociado a una detallada investigación sobre las especificaciones y creencias culturales. No solo para comprender las necesidades de la adaptación, sino también identificar correctamente todas las transposiciones culturales que se deberán aplicar. En un trabajo de localización de software, nada podrá darse por cierto y definitivo, así como tampoco llevado a cabo con incertidumbres o sin una investigación previa, ya que, algunas características pueden ser universalizadas y no se podrán establecer como parámetro de aplicación.

 

Para ZAUM la localización de software está entre nuestras especialidades. Son varios los casos de éxito de los cuales fuimos responsables de la adecuación de las expectativas del cliente ante las características del público objetivo, y brindamos gran satisfacción en relación con el más alto nivel de calidad en la entrega del producto.

¡Venga a conocernos!

Fuentes: http://www.andrebuzzo.com.br/o-significado-das-cores/#.V_Q97oWcHIU